5 de febrero de 2018

SOCORRO, MI CUERPO ESTÁ CAMBIANDO Y NO PUEDO CONTROLARLO

Sí, así es, tu cuerpo está dejando su forma infantil para comenzar a transformarse en un cuerpo adulto. ¿Hacia dónde irá?, ¿cuánto crecerá de aquí o de allá? Son preocupaciones normales, ahora todo es nuevo e incierto, pero llegará un momento en el que te familiarices con él y deje de desconcertarte tanto.

Como sabes, estos cambios son normales y necesarios para desarrollarse, sin embargo a veces estamos tan preocupados por el rumbo que pueda tomar que intentamos controlarlo cambiando nuestros hábitos alimenticios, haciendo más deporte de lo normal o usando cosméticos que nos ayuden a cambiar o disimular ciertos aspectos.

A menudo nuestro entorno nos empuja a tener un determinado aspecto físico, normalmente delgado, esbelto… parece que esas personas son más aceptadas y reconocidas por sus iguales. Tal vez temas no cumplir esas características. Puede que incluso te fijes constantemente en lo que no te gusta de tu cuerpo y lo vivas como un fracaso…

Bienvenido a la realidad. La realidad es que nuestro cuerpo no se puede elegir, es cierto que se puede moldear (comiendo de forma saludable y haciendo un ejercicio sano) pero hasta un límite. Cuidado con los objetivos que te propones, puede que no estés siendo realista y estés forzando demasiado a tu cuerpo.

El objetivo correcto es descubrir tu belleza auténtica y particular disfrutando y sin torturarte.

Para ello, hoy te proponemos una alimentación fácil y saludable ¿te animas?:

  • Come entre 3 y 5 veces al día (desayuno, media mañana, comida, media tarde, cena). Así no pasarás hambre ni llegarás hambriento a las comidas.
  • No comas mientras haces otra actividad como ver una serie. Cuando estás distraído puedes comer demasiado rápido y más de lo normal.
  • Sírvete lo que te vayas a comer.
  • Come despacio: cuando comes deprisa no das tiempo a que tu cuerpo informe a tu cerebro de que has comido suficiente y puedes comer más de la cuenta. Para ello:
    • Mastica bien.
    • Mantén la cabeza alta y lleva la comida a la boca en lugar de acercarte a la comida.
    • Deja los cubiertos en la mesa entre bocado y bocado.
    • Toma bocados más pequeños.
    • Mantén los cubiertos sobre el plato mientras masticas y tragas antes de coger un nuevo bocado.
    • Espera 5 minutos antes de repetir.
  • Come siempre en el mismo lugar.
  • Come sentado: facilita la digestión y por tanto asimila mejor las grasas sin retenerlas.
  • Almacena en sitios poco visibles o de difícil acceso los alimentos menos sanos.
  • Planifica la compra: haz una lista para asegurarte de comer bien.
  • Mantén una dieta variada: Casi todos los alimentos son buenos pero no en las mismas cantidades:

Así podrás disfrutar de la comida y no tendrás que recurrir a dietas agobiantes e interminables. Estarás saciado porque comerás a menudo, de forma ordenada, serán los alimentos que tu cuerpo necesita, en la cantidad adecuada y a un ritmo tranquilo.

¡Y no te olvides de beber agua y hacer deporte! Tu cuerpo necesita moverse y mantenerse activo, camina, nada, practica un deporte de equipo o haz una actividad que te divierta unas 2 o 3 veces por semana.

Ahora bien, si has perdido el norte con la comida y te sientes descontrolado, o por el contrario te pasas el día controlando todo lo que comes, puedes estar desarrollando un problema de alimentación. En ese caso pide ayuda profesional antes de que se agrave, los problemas de alimentación pueden generar mucho desgaste emocional.

Compártelo

Valores:

Temáticas:

Problemáticas:

Otros contenidos relacionados

  • 0,1 min read

    8. La armadura - Metáforas ACT para liberarte de la tiranía de la mente ...

  • 0,7 min read

    Paz Gómez Ferrer, psicóloga y coach especializada en talento, habla de la empleabilidad en la sociedad del conocimiento. ...

  • 0,1 min read

    La nutrición debería ser una asignatura obligatoria en los colegios

  • 0,1 min read

    7. El jardín - Metáforas ACT para liberarte de la tiranía de la mente ...